El Dr James Dobson dice que las mujeres nacieron con la bendición lingüística de usar al menos 50 mil palabras al día; entre tanto que los hombres solo 25 mil. Ello puede ocasionar fuertes dificultades comunicativas en el hogar. Un problema puede surgir cuando el caballero llega a casa, habiendo usado unas 24990 palabras y las 10 restantes que usará en su hogar no son precisamente “palabras” sino más bien monosílabos o refunfuños. Las Damas pueden contribuir a la armonía familiar al regular el uso de las 50 mil palabras, mientras que el caballero debe esforzarse en hablar un poco más, pero también esforzándose en escuchar atentamente.