Muéstrate afectuoso para con tu esposa, frente a tus hijos.
No se trata de melosería o de ser empalagoso.
Es elogiar por medio de palabras, abrazos, gestos, sonrisas a tu cónyuge, FRENTE a tus hijos.
¡Cuando lo hacemos ellos aprenden a dar reconocimiento y a expresar el afecto!
Esposo, trata a tu esposa, ¡cómo te gustaría que tus hijos la trataran!